A veinte años de la caída del infame Muro de Berlín, el mundo, en especial Latinoamérica, observa cómo cada día está más cerca la creación de otra de estas vergonzantes murallas que dividen pueblos hermanos, humillan su voluntad y crean barreras absurdas que jamás debieron existir.
Me refiero al virtual muro creado por Chávez para cerrar la frontera con Colombia. El "Muro de Chávez" cada día es más real y peligroso. Asombrados vemos el endurecimiento de una frontera antes abierta, amigable y fructífera. Allí, donde por tradición ha existido comercio e intercambio entre familias y pueblos, sin problema ni conflicto, hoy se vive en total zozobra.
Paso a paso, Chávez ha ido creando un murallón entre nuestros países hermanos, que si aún no es de concreto, ladrillo o piedra, sí es de odios, insultos y amenazas. Bien sabemos que a veces son más graves y dolorosos los muros creados con palabras que los creados con cemento.
Es rara la vez que Chávez no utiliza los micrófonos de su inflamatorio programa "Aló Presidente" para arremeter contra Colombia con toda clase de acusaciones fantasiosas o claramente ficticias.
De ocasionales cierres de la frontera, que se han ido sucediendo desde el comienzo del gobierno de Chávez en Venezuela, hoy se ha escalado a una casi parálisis total del movimiento entre las dos naciones. La situación en la frontera colombo-venezolana, antes fluida y de mutuo provecho, hoy se ha convertido en un polvorín, que con cualquier mecha se puede prender.
A diario hay las noticias y fotos de familias atravesando de un lado a otro de la frontera por entre matorrales, saltando tapias, o cruzando el río a pie. Vigilados por guardias armados que aún no se atreven a disparar, pero que de seguir las cosas así, no demorarán en hacerlo. ¿Y ¿entonces qué? ¡Sangre y bala entre hermanos! ¿Es esto lo que quiere Chávez? Es un falso nacionalismo lo que está promoviendo este avezado alumno de Fidel Castro.
Chávez quiere con esta camorra constante contra Colombia y los colombianos, tender una venda sobre los ojos de los venezolanos para que no vean lo que está sucediendo en su propio país.
Para que no vean cómo cada día pierden más derechos y su Presidente cierra sobre ellos un cerco al estilo soviético, al modelo de la revolución comunista que mantuvo a naciones enteras sometidas y dividió a Berlín, sus gentes y familias con ese ominoso muro.
Ojo venezolanos, que no sean ustedes los próximos en perder sus libertades y ser encerrados detrás de un muro infame.
Ojo países del mundo libre, tomen conciencia del riesgo para la paz que significa el escalamiento infundado de tensiones en la frontera colombo-venezolana.
No comments:
Post a Comment